La llamada “Nueva Canción latinoamericana”, “Trova” o antes llamada “La canción de protesta social”, tuvo su máxima expresión en las décadas de los sesenta y setenta, y continúa hasta hoy desplegándose. Es un género de creación poética y musical que brotó junto con los movimientos de izquierda paralelos y posteriores a la revolución cubana de 1959, con precisos objetivos ideológicos y dentro de la confianza por el triunfo que Fidel y el Che habían logrado en Cuba. Se buscaba crear conciencia, especialmente en la clase media y obrera, de la necesidad de un cambio radical de las estructuras socioeconómicas, presentando temas relacionados con la represión militar o la desigualdad social. También buscó fomentar un sentido de unidad latinoamericana en torno al objetivo común de “despertar” y movilizarse políticamente en contra de la burguesía. La mayoría de estas canciones han sido escritas por intelectuales y artistas de clase media, muchos de ellos universitarios. El género se desplegó principalmente en el Cono Sur, pero ha sido cultivado en toda Sudamérica, Nicaragua, El Salvador y también, aunque con menor intensidad, en el resto de Centroamérica, Puerto Rico y Honduras. Con gran presencia y actividad de trovadores en Cuba, México, Venezuela y desde hace algunas décadas también en Chile donde la Nueva Canción ha tenido un desarrollo extraordinario, con obras de gran belleza poética y figuras altamente representativas.
Para comenzar o para interiorizarse aun más, aquí hay algunos enlaces, en varios de ellos incluso se puede escuchar discos completos de Trovadores Latinoamericanos...
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